Los concejales Eloy Sarmiento, María Neli Moreno, Eduardo “Borola” Matheus y Roselinne “La Coca” Matos, quienes representaban a la Fracción de Caña Piña y Tambor, la cual tiene la mayoría en el Concejo Municipal de Motatán, en vez de andar en diatribas estériles deberían ponerse al frente para luchar y defender los derechos a los mas de 25 Empleados, 10 Obreros y 120 Contratados, los cuales sumas mas de 150 padres y madres de familia, que fueron echados a las calle como perros, por la nueva administración socialista del Alcalde Elmer David Palma y el PSUV, sin que hasta los momentos le hayan dado una repuesta positiva sobre cuando harán efectiva el cobro de sus prestaciones sociales.
Estos concejales deberían estar denunciando al nuevo alcalde ante el Ministerio del Trabajo, Procuraduría del Trabajo y Ministerio del ramo, pues en el caso de los Obreros Fijos y aquellos contratados que tienen mas de Dos (02) Contratos Consecutivos, los cuales son fijos de conformidad con el Articulo 74 de la Ley Orgánica del Trabajo así como también haciendo valer el Decreto, emanado por el Comandante Hugo Chaves Frías, de Inamovilidad Laboral el cual los ampara. Donde estaban estos señores cuando el 30 de Diciembre la Alcaldía Socialista de Motatán le cancelo como le dio la gana los aguinaldos a los contratados y todos esperan respuestas por los beneficios establecidos en el respectivo contrato. Seria interesante escuchar las razones por las cuales estos Concejales le aprobaron, a mano alzada, una cantidad considerable de recursos económicos en el nuevo presupuesto para que el Alcalde hiciera caída y mesa limpia, a través de un despido masivo, con los Obreros Fijos, todos en su mayoría del Grupo de electores Independientes “Caña, Piña y Tambor”; en la calle se dice que los Concejales realizaron un exhorto al Gobierno Municipal pero que primero pidieron permiso y le explicaron al alcalde que el mismo no es vinculante.
De igual manera, estos ediles no pegaron ni un gritico vagabundo, ante el despido injustificado de bastantes empleados de la Alcaldía quienes los botaron en algunos casos sin causa justificada o sea “por las razones que uds. Conocen”, clasificándolos de empleados de confianza cuando en esa alcaldía no existe ordenanza de personal, ni un manual de cargos y procedimientos y mucho menos cumplieron con el “procedimiento disciplinario de destitución” establecidos en la Ley del Estatuto de la Función Publica. También deberían pelear por que aquellos trabajadores, que una vez fueron sus compañeros, les cancelen su contratación colectiva y el respectivo fideicomiso, pues se rumora que por un capricho de la Actual Directora de Hacienda Municipal no se les quiere incluir en la futura cancelación que por este concepto realizara próximamente la alcaldía de Motatán. Tampoco se preocuparon por incrementar los emolumentos a los miembros de las Juntas Parroquiales sino que solo estuvieron atentos para que sus dietas fueran incrementadas.
Ya para finalizar hago un llamado a estos concejales para que rectifiquen su posición y aprueben las cosas que vayan a favor del pueblo y no se presten a maniobras que afectan a un gran numero de ciudadanos y ciudadanas, que hace 4 años trabajamos fuertemente para colocarlos en sus curules.
Javier Antonio Reinoso Muñoz
Ex Trabajador de la Alcaldía del Municipio Motatán
